Las zapatillas deportivas que lanzó el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, bajo el nombre de Never Surrender (Nunca te rindas), se han convertido en un objeto de deseo para sus seguidores y en un negocio lucrativo para los revendedores.
El sábado 17 de febrero de 2024, Trump presentó su línea de calzado en la Sneaker Con de Filadelfia, una convención para los fanáticos de las zapatillas, donde apareció por sorpresa y dio un discurso político. Las zapatillas, de color dorado con detalles de la bandera estadounidense y la letra T en los costados, se vendieron por 399 dólares y se agotaron en pocas horas, según el sitio web que las ofrece.
Sin embargo, algunos de los compradores no tenían intención de quedarse con las zapatillas, sino de revenderlas a precios mucho más altos en plataformas como eBay. Una rápida búsqueda en eBay el domingo arrojó un par de zapatillas por poco menos de 5.000 dólares.
Un fanático de MAGA (Make America Great Again), el lema de Trump, afirmó haber pagado una oferta de 9.000 dólares por un par autografiado por el expresidente.
Los expertos en marketing consideran que las zapatillas de Trump son un producto de nicho, dirigido a un segmento muy específico de consumidores, que comparten los valores y el estilo de vida del expresidente. Se trata de un ejemplo de branding personal, es decir, de la construcción de una marca alrededor de una persona, que busca diferenciarse y generar lealtad.
No obstante, también advierten que este tipo de productos tiene un riesgo alto, ya que depende de la percepción y la opinión pública, que pueden cambiar rápidamente. Además, señalan que las zapatillas de Trump no tienen una propuesta de valor clara, más allá de la asociación con su figura, y que no ofrecen una calidad o un diseño que justifiquen su precio.
El lanzamiento de las zapatillas se produce en un momento delicado para Trump, que enfrenta graves problemas financieros y legales que amenazan su futuro político. El viernes anterior al lanzamiento, un tribunal de Nueva York le impuso una multa de 355 millones de dólares por actividades fraudulentas de su empresa Organización Trump y le prohibió hacer negocios durante los próximos tres años en esa ciudad, su lugar natal.
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